The Who (Another Tricky Day) - 1981 / (Eminence Front) - 1982 / I can´t explain (1965) / The real me (1973)

The Who es, o más bien fue, una de las bandas de rock más prestigiosas de todos los tiempos. Y esta es la pregunta... ¿Se  merecen estar en el podio de los más grandes? El público y la crítica dice que sí, pero voy a hacer de abogado del diablo. Empecemos por reconocer que este grupo merece una tribuna, pero después de un repaso profundo a su discografía nos encontramos con mucha metralla, pero mucha mucha.

La película Quadrophenia fue el puntal para que se tomara a este grupo como bandera del movimiento mod, pero si tenemos que hablar de montantes musicales de calidad, lo cierto es que el haber de The Who palidece frente a los "sacos" de buenas canciones que tienen otros grupos de la época con igual tirón mediatico. Pensemos en Deep Purple, Beatles o Yes, por ejemplo. Nombres que suenan con la misma fuerza que The Who, pero este grupo... ¿en qué sustenta su leyenda? Pues mi opinión es que no puede basarse estrictamente en su producción musical, ya que es muy inferior en número y calidad comparándola con los grupos mencionados. El nombre de The Who se sostiene a base de "My Generation" y otros cuatro temas más, destacando de esa época por encima del resto "The real me", pertenciente a la BSO Quadrophenia. El resto es potencia mediática extramusical: la citada película, el abanderamiento mod, el carisma de sus directos, el impresionante baterista Keith Moon, y el rompeguitarras Pete Townsend. Pero, ¿y su música? ¿Existe algo grande aparte de My Generation, I Can´t Explain y Won´t Get Fooled Again? Sí. Existe. Pero curiosamente lo encontramos a partir de la muerte de Keith Moon.
En 1981 presentaron "Face Dances", con un nuevo batería, Kenney Jones, resultando un disco casi perfecto, donde se aprecia una evolución muy interesante: presenta un sonido más maduro, moderno, complejo y sofisticado. Se repitió lo mismo al año siguiente, donde vuelven con "It´s Hard". Pero a pesar de las buenas críticas, los fans añejos no entendieron el cambio de sonido y eso se resintió en las ventas. Aparte, Pete Townshend declaró su incapacidad para seguir con el proyecto debido a su alcoholismo. Otra lástima.
Los dos primeros cortes pertenecen a esta última época por dos razones: por ser la más desconocida y por ser de una calidad que merece ser reivindicada.

Hay que decir que en 2006, después de 24 años, volvieron con Endless Wire, un trabajo para la galería, con algún destello pero poco que ver con lo que fueron.