Origen: Londres.
Periodo: 1975 - 1978.
Susto mediático del establishment británico de fines de los ´70. No en vano su buque insignia (God save the Queen) fue prohibido en todas las emisoras UK.
Tuvieron una sorprendente resonancia si tenemos en cuenta su producción: algunos sencillos y un único LP, "Never mind the Bollocks".
Sid Vicious (John Simon Ritchie) murió poco después de la disolución de Sex Pistols. Pero le dio tiempo a hacer alguna cosita en solitario. La versión de My way de Sinatra es muy recordada y la incluiremos aquí.
Idea loca:
Michael Landon hizo un capítulo ficticio para su serie Autopista hacia el Cielo en que se transportaba como angel a 1978 y le daba a nuestro héroe tres o quince consejos para que la cosa no acabara como el rosario de la aurora. Lástima que no se le ocurriera ese guión, hubiera estado bien.
El famoso ladrillo de Robert Dimery, "1001 Discos que hay que escuchar antes de morir" tiene nada menos que a Sid Vicious en su portada. Por algo será.
Tras su muerte se transfiguró, y su imagen ha sido estampada en millones de camisetas. Aunque fuera un mal bajista y un ser que llevó su inmadurez a límites prohibidos por la naturaleza, se merece que conozcamos sucintamente su historia.
Haremos siete paradas rápidas:
1. Sid era un fan declarado de David Bowie. Dato muy curioso que avisa que en sus comienzos aún le funcionaba el sonajero.
2. Johnnie Rotten -el cantante- (de nombre real John Lydon) fue amigo de Ritchie desde jovencito, compartían piso y el nombre de Sid Vicious se lo puso Rotten cuando su hamster (Sid) mordió a su amigo. Fue él el que le introdujo en Sex Pistols.
3. No fue su primera incursión musical, antes ya había cantado y tocado la batería. Sin embargo fue contratado como bajista, aunque por error, pues la mánager quería que fuera la voz del grupo debido a su actitud rebelde y polémica, con una hoja policial que le sirvió de currículum incontestable.
4. Sid no tenía mucha idea de tocar el bajo, aunque lo intentaba. La mayoría de lo grabado en "Never mind the Bollocks" no está tocado por el sino por el bajista Steve Jones.
5. Comenzó una relación con una groupie, Nancy Spungen, una chica destructiva y heroinómana. Su obsesión era palmarla puesta hasta el culo, pero quería llevarse a Sid con ella en el pack. Parece que establecieron unos lazos muy fuertes, y parece que no solo consiguió su objetivo sino que también se llevó su corazón.
6. Spungen murió finalmente de una cuchillada en el abdomen en una habitación de hotel que compartía con Sid. No está claro qué es lo que ocurrió. Aunque el ínclito fue arrestado por su muerte nadie de su círculo se creyó que el fuera el autor del crimen. (Hay otro personaje oscuro en esta historia, que aquí no viene al caso). Fue liberado a los cuatro meses. Virgin Records pagó la fianza y Mick Jagger (de incógnito) pagó su abogado. El 1 de febrero de 1979 su madre le organizó una fiesta para celebrarlo. Estaba limpio de drogas, sin embargo se inyectó una sobredosis de heroína que lo llevó a la tumba. Tenía solo ventiún años.
7. Días después se encontró una nota suya que decía: "Hicimos un pacto de muerte, yo tengo que cumplir mi parte".
Ejemplo ejemplar de lo que ocurre cuando las palomillas de la sesera están dramáticamente desajustadas.
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