jueves, 7 de marzo de 2019

The Rolling Stones (Too much blood) - 1983 / (Monkey man) - 1969 / (Rock and a hard place) - 1989

Origen: Londres.
Periodo: 1962 - hoy.

Después del estudio de casi seiscientos grupos (399 en Sumudaba) me decido por fin a publicar artículo sobre esta banda. Por muchos alzada a los más altos podios del rock pero que a mí personalmente siempre me ha dicho muy poco. De ahí esta "inusual" tardanza en acometer el estudio de los Rolling. Sinceramente, me daba bastante pereza.
Mick Jagger es buen músico y hace ya bastante tiempo que tiene aquí su podio en solitario, pero su grupo tiene para mi un defecto insalvable, que es la manera burda de tocar la guitarra que tiene Keith Richards, al menos durante toda su primera época.

The Rolling Stones, desde sus comienzos en 1962 hasta mediados de los ´70, no hacía más que intentar una y otra vez los blues de mecedora de negros gloriosos de antaño, replicando músicas y acordes gastados pero recubriéndolos de una pátina rockera muy oportunista pero además de baja calidad.

Siempre me pareció un despropósito la comparación entre Rolling y Beatles, porque los Beatles supuran creatividad, cosa que no ocurre al otro lado. Una estupidez repetida un millón de veces no deja de ser una estupidez. Los Rolling no eran estúpidos, pero su logro consiste en el mérito de haber hecho creer a millones de fans que su música es excelsa, cuando no es así.
Cualquiera que se tome la molestia (o el gusto) de comprobarlo puede constatar que grupos contemporáneos y paralelos como los citados Beatles, Deep Purple, Uriah Heep, Led Zeppelin, The Who, The Animals, Them, Pink Floyd... derrochan eventos musicales mucho más creativos que lo que proponían Rolling Stones, en su gran mayoría una suerte de interpretación rock de los blues de la música negra.
Bastante penoso, sobre todo porque Keith Richards no llegaba ni a la suela de aquellos grandes intérpretes de referencia.

Luego está el asunto de sus millonarios y "míticos" conciertos, que no son más que una bien engrasada maquinaria de hacer dinero. Seguro que conoces a alguien que ha ido a verlos. Yo también. Pero luego les preguntabas por sus gustos musicales y eran cochambrosos.
Yo creo que a los Rolling va o ha ido a verlos a) todo aquel que no tiene mucha idea de música y quizá su discoteca se componga de una docena de discos, y b) los que se dejan seducir por los cantos de sirena de los mass media -que han sido por otro lado bien untados por los mecanismos publicitarios made in Stones-. Hay mucha gente que década tras década ha ido entrando en su juego y después gusta del alarde. "He ido a ver a los Rolling y me ha costado casi 300 euros la entrada, pero ha sido una pasada" (para la mente de ese ciudadano sería imposible que no lo hubiera sido, sobre todo después del desfalco que ha sufrido su bolsillo). La bola ha ido corriendo y creciendo con los años, cogiendo el grupo cada vez más caché y arrastrando a más pijos pastosos descerebrados.

Por todo ello aquí solo encontraréis algunos dispersos temas en los que por fin los Rolling se decidieron a inventar algo nuevo.
Es muy probable que cualquier fanático alegue que esto no son los auténticos Stones, que no son temas representativos. Y seguro que tienen razón, pero es que sus famosas canciones tienen un valor tangencial. Aquí decide la coherencia, como explico en la introducción.






1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buenos los dos primeros ☺